-Soñaba con despertar, de este inmenso letargo..
Pero cuando abrí los ojos, me di cuenta de algo.
De que la vida no se compone solo de lo que tu quieres,
es preciso aceptar, conforme te viene....
-Me puse en mis labios una rosa y la besé...
Y en ellos se quedó su maravilloso color, desprendiendo,
su aroma, emanando ese olor, que te hace soñar....
Vi la vida en ella, y me hizo pensar...
-Pensar, en que si tienes vida, pero no hay color, no la vives,
con ilusión...
Esa rosa es un ejemplo..
Si la mantienes sigue, pero si la cortas, ya no le queda tiempo...
-Somos como las flores, nacemos crecemos y marchitamos.
Y de pende de cada uno el aroma que regalamos...
Yo quisiera tener para siempre cien ramos...
Y que su aroma, me regalase todo el tiempo que nos amamos..
-Su tallo largo y esbelto, lleva la sabia en sus venas.
Para que al besarla, me llene de cosas buenas...
Me puse una rosa en mis labios, y me devolvió su aroma.
Con ella cerré mis ojos y me volví a Roma...
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